El conocido chocolatier francés Patrick Roger creó este sorprendente y gigantesco árbol de Navidad de chocolate para un telemaratón destinado a recaudar fondos para la investigación de las enfermedades neuromusculares.
El árbol medía 10 metros de alto y pesaba casi 4 toneladas. A él y a su equipo les llevó construirlo un mes de trabajo en su obrador de las afueras de París.
Y escribo en pasado porque el árbol ya no existe si los telespectadores participaron comprando trozos de chocolate tal y como se esperaba a principios de diciembre.
Pero aquí queda esta foto y un enlace a un vídeo muy cortito.
Patrick Roger fue nombrado mejor artesano chocolatero de Francia en el año 2000. Un título que recompensa a quienes mezclan el arte y el gusto y atribuido a los más dignos representantes de la gastronomía francesa. Sorprendentemente, hasta los 18 años no había comido chocolate porque no le gustaba.
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