Nos acercamos al Domingo de Pascua. No falta nada para que llegue la Semana Santa y comiencen las vacaciones de muchos de vosotros. Todos los cristianos del mundo celebrarán la Pascua de Resurrección. Y todos los golosos buscarán cualquier pretexto para comprar huevos, pollitos o conejos de chocolate.
En Barcelona, las pastelerías y supermercados nos inundan desde hace días con huevos, conejos, balones y escudos de fútbol, figuras de futbolistas, personajes de dibujos animados, etc. Las creaciones más sofisticadas reproducen otras esculturas de animales o de personas, objetos, edificios, etc.
Los medios de comunicación entrevistan a los pasteleros, chocolateros y cocineros más famosos y sacan las monas más espectaculares en la tele. Desde hace tiempo, artesanos pasteleros no tan conocidos -pero no menos buenos- trabajan para continuar la tradición de la mona.
En Cataluña, la mona de Pascua es una costumbre tan arraigada como el libro y la rosa el día de Sant Jordi y que también existe en la Comunidad Valenciana, Aragón y Baleares. En realidad, la mona catalana es una tarta de bizcocho recubierta de mantequilla, chocolate o yema a la que se ha añadido un huevo u otro objeto de chocolate como elemento decorativo. También puede adornarse con plumas, pollitos, etc. En Valencia la mona es más bien una tarta tipo bollo que se llama "panquemado".
Pastelería Boages |
Ambas fotos futboleras, de la Pastelería Jaume (y no me gusta el fútbol) |
En Cataluña, la mona de Pascua es una costumbre tan arraigada como el libro y la rosa el día de Sant Jordi y que también existe en la Comunidad Valenciana, Aragón y Baleares. En realidad, la mona catalana es una tarta de bizcocho recubierta de mantequilla, chocolate o yema a la que se ha añadido un huevo u otro objeto de chocolate como elemento decorativo. También puede adornarse con plumas, pollitos, etc. En Valencia la mona es más bien una tarta tipo bollo que se llama "panquemado".
Con el paso del tiempo se ha acabado llamando mona a la figura de chocolate. He leído que antaño se decoraba la tarta con un huevo de gallina pero que luego éste se sustituyó por el de chocolate.
El término mona tiene muchas supuestas procedencias. Según los lingüistas podría proceder tanto del árabe munna (regalo) como del latín monus. Parece ser que los romanos regalaban huevos cocidos con pasta de pan.
En sus inicios era un pastel parecido al pan cuya masa estaba elaborada con harina, huevos cocidos y azúcar. La tradición catalana quiere reivindicar otro origen: una pastelería barcelonesa adornó el pastel con una mona y fue todo un éxito. En cualquier caso, el padrino regala una mona a su ahijado el lunes de Pascua, que es festivo en Cataluña. La tarta, el huevo o la estructura de chocolate se suele comer en familia. Del mismo modo que la tarta varía, existen distintas maneras de celebrar el día de la mona según las familias.
Desde El mundo del chocolate recomiendo las monas de pastelería por la calidad de los ingredientes y el mimo con el que las elaboran. Quien piense que son caras (entre 25 y 75 € la mona para una familia), que medite el trabajo que conllevan. El precio depende de la pieza de chocolate que lleve, así como del tiempo empleado en su elaboración. En algunas pastelerías hay piezas vistosas de chocolate a partir de 15 €. En los supermercados hay figuras de chocolate de todos los precios. Conejitos y huevos de chocolate los encontraréis por todas partes, de distintos chocolates y calidades.
Los reposteros caseros pueden elaborar el pastel en casa y comprar un huevo o figura de chocolate para colocar encima. O incluso hacer el huevo o figura de chocolate. Os pongo una receta de mona del blog Peque Recetas aquí y un enlace a Youtube de Catalan Cooking aquí. El blog Gastronomía & Cía tiene una receta del panquemado, a la que puedes acceder aquí. Y si entras aquí, encontrarás en el blog En Guete otra receta de una torta de Pascua. En Suite 101.net hay otra receta de la mona de Pascua de la Comunidad Valenciana. Y en el blog Cocinando con gusto, una receta de una tarta toda de chocolate que es una delicia. Clica aquí.
Con información de Jaume Fábrega, historiador y experto en cocina catalana y con una página web Catalan Cooking, los blogs A fuego lento, Gastronomía y Cía y nota de prensa del Gremio de Pastelería de Barcelona y provincia.
Agradecimiento especial a Maite y a Juan Antonio, de la Pastisseria Ainhoa (C/Galileo 335) así como a Cristina y a José, del Forn Pastisseria Jaume (C/Joan Güell 135) y a la Pastisseria Boages (Gran Via de Carlos III, 30) de Barcelona, cuyas monas reproduzco. Todas son pastelerías de mi barrio, Les Corts.Tengo encargada en Ainhoa una casita de chocolate con pollitos para mi ahijado Pepe (¡glups, era una sorpresa!; bueno, Pepe todavía no es internauta).
Interesante la historia de las Monas de Pascua...
ResponderEliminarYo seguiré fiel a la tradición de huevos y conejos de chocolate, tal como lo hacen por mis pagos ;)
La tradición de la Mona de Pascua, es curiosa. En Catalunya está muy extendida, los padrinos y madrinas regalamos a nuestros ahijados la mona y la palma o el palmón.
ResponderEliminarEl origen de los huevos de Pascua viene - creo - en inicio durante la cuaresma se ayunaba y no podían comerse carne ni huevos, con lo que los fieles al finalizar la cuaresma obsequiaban los huevos que habían ido guardando durante los días que duraba el ayuno cuaresmal ( que creo que son 46).
Los huevos se guardaban y pintaban para regalarlos al fin de la cuaresma y celebrar el inicio de la Pascua.
La tradición religiosa se ha perdido bastante y ahora la Mona tiene un contenido más artístico y comercial.
A los niños les encanta y mi ahijada Lucía no perdona su mona, este año eran tres patos de distinto tamaño y distintos chocolates con huevos de colores de Blasi (C/Alfonso XII,26)
donde venden unos chocolates totalmente recomendables, por calidda y por precio.
En Menorca, además de todo lo anterior los padrinos regalan a sus ahijados un caramelo largo y tienes toda la semana santa para “fer punta”.
No he sido capaz de encontrar una foto, pero es una tradición muy especial y que me trae a la memoria muchos recuerdos...
Muchas gracias, Valeria, y Carmen, por vuestras aportaciones al blog.
ResponderEliminarValeria es argentina y me recuerda una Semana Santa que pasé en Uspallata (provincia de Mendoza), precioso lugar. Encontré un chocolate buenísimo en la ciudad de Mendoza; no recuerdo el nombre de la confitería. Lo tendré que buscar.
Carmen, ¡qué bien explicada la tradición de los huevos de Pascua y qué bonito regalar ese caramelo a los ahijados en Menorca!
Tu ahijada Lucía estará encantada con esa mona con patitos y huevos :D
¡Buena Semana Santa a las dos y a todos los seguidores!
Pues yo os cuento que en galicia aun se regalan pasteles con huevos como los romanos que decia el post, aun no se han pasado al chocolate, que a mi al menos me parece una opcion mas interesante...
ResponderEliminarpara cuando una disertacion sobre los poderes (o no poderes) afrodisiacos del chocolate??
salud
Muchas gracias por tu comentario, Ana. En Cataluña también hay monas con huevos de verdad pero no las he visto más que en fotos. A ver si encuentro alguna por la web para ponerla.
ResponderEliminarEn cuanto pueda escribiré sobre los efectos afrodisiacos del chocolate. Gracias por darme la idea y estáte al tanto.
En mi opinión, el chocolate es un alimento que aumenta la libido porque es muy energético y estimulante. Pero sobre todo, porque está buenísimo.
Antes voy a escribir sobre cómo mantener la línea comiendo chocolate, ya que en esta época parece interesar más a tanta gente que está a dieta).
¡Saludos chocolateros!
Aaaaa.... jejejejejeje No, la que anda despistada soy yo... Es que cuando entro aquí me mareo con tanto chocolate... COMO NO PUEDO COMERRRRRR.... Por mucho que digas en la primera entrada que si... TE haré caso cuando lleve un par de semanas más, a ver qué pasa... Jejejejjejeje Besos y gracias por el enlace, siempre se alegra una con estas cosas...
ResponderEliminarBesos!!!!!!
María josé
María José, entonces no entres hasta que estés estabilizada con la dieta. Ya verás qué bien te va.
ResponderEliminarAunque recalco que la mayoría de los nutricionistas son partidarios de no prohibir alimentos porque luego, el ansia que se produce es peor.
Yo sólo he estado a dieta blanda una vez y me afectó no poder comer de nada...